Soñé que estaba mirando la tele acostada en la cama de mi madre entre ella y un hombre, Ricardo, mi tío abuelo. Mientras me iba del cuarto pensaba: ¨Qué raro que duerman en la misma cama si solo se queda unos días¨. Cuando llegaba a mi cuarto me espantaba porque se había transformado en el de mi madre, sucio, oscuro, con olor a pucho y sin decorar.
Después pasaba a otro momento en el que en mi cuarto (ahora una mezcla entre el mío y el de mi madre) estaban Agustín y Valentina y yo les decía: “Ya fue, perdí contacto con la realidad del todo” en tono alegre y aliviado y Valentina me decía algo así como “Bienvenida, te felicito” y se convertía en una versión tamaño humana de Catalina, una muñeca mía de cuando era chica. Ahí todo se empezaba a poner maligno y me acuerdo de sentir el sonido de una avispa muy amplificado y quererme despertar.
16/02/2018